El estudio de la comunicación en las organizaciones ha sido fundamental para entender su composición. De hecho, se puede afirmar que la comunicación es el proceso mediante el cual se constituyen las organizaciones. Al respecto, la Teoría de la Comunicación Constitutiva de las Organizaciones en adelante (CCO) ha centrado a la comunicación como el medio por el cual los seres humanos coordinan acciones, crean relaciones y mantienen organizaciones.
De acuerdo con Putnam, Nicotera & McPhee (2009) las organizaciones son discursos que se interpretan al menos de tres maneras: como objetos, estados del devenir y basados en la acción. La tradición de la CCO nace en la Escuela de Montreal con teóricos como Karl. E. Weick (1979), la Escuela de los Cuatro Flujos con McPhee (2009) basada en la Teoría de la Estructuración de Anthony Giddens y la Escuela de los Sistemas Sociales de Niklas Luhmann (1998) como referente para la evolución teórica y práctica de la CCO.
En particular, la Escuela de los Cuatro Flujos plantea que las organizaciones están constituidas en flujos comunicativos y estos a su vez son diferentes en su dirección principal y en su contribución a la constitución organizacional. Cada uno hace una contribución diferente e importante. A su vez, cada flujo genera una especie de estructura social a través de la interacción al permitir que un flujo controle o condicione a otro.
En ese sentido, para Putnam, Nicotera & McPhee (2009) los cuatro flujos son:
La negociación de la membresía. Las organizaciones siempre deben incluir miembros. La membresía en cualquier organización no es una propiedad natural de las personas sino que está constituida por el flujo de comunicación.
La estructura auto organizacional. Se refiere a que las organizaciones son objetos no meramente de atención reflexiva sino de control y diseño reflexivos de autoestructuración. La autoestructuración es un proceso de comunicación entre los titulares de roles organizacionales y los grupos.
Coordinación de actividades. La comunicación ayuda a coordinar las actividades de los miembros. Las organizaciones por definición tienen al menos un propósito manifiesto, y la actividad de los miembros y subgrupos está parcialmente dirigida hacia él.
Posicionamiento institucional en el orden social de las instituciones. Es el de la comunicación fuera de la organización, a otras entidades a nivel macro, en términos de sistemas o función. Dichas entidades incluyen proveedores, clientes, competidores y colaboradores, incluidos los candidatos a fusiones o adquisiciones. También se incluye a organizaciones más poderosas como compradores potenciales y reguladores gubernamentales. En este flujo a menudo los comunicadores son individuos en roles que traspasan los límites y que negocian los términos de reconocimiento de la existencia y el lugar de la organización al mismo tiempo que negocian sus propias relaciones.
La negociación de la identidad de acuerdo con los autores, es una etiqueta atractiva para este tipo de comunicación “posicionamiento” porque este último incluye tanto el establecimiento de la identidad como el desarrollo y mantenimiento de un “lugar” en el sistema social interorganizacional.
De acuerdo con Taylor (2008) el lenguaje desempeña muchas funciones en la vida social pero “una de ellas es capacitar a las personas para que trabajen juntas para lograr cosas prácticas” (p. 158) y la CCO es el proceso que transforma a las organizaciones a través de formas discursivas que fluyen continuamente para lograr un equilibrio entre las estructuras y sus miembros.
Referencias
Putnam, L., & Nicotera, A. (2009). Building Theories of Organization. The Constitutive Role of Communication. New York and London: Routledge.
Seidl, D., & Becker, K. (2013). Niklas Luhmann and Organization Studies. Dinamarca: CBS Press.
Taylor, F. W. (n.d.). Shop Management. Project Gutenberg.
Weick, K. (1979). The social psychology of organization. Paris: McGraw - Hill.
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